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Los investigadores han descubierto un nuevo biomarcador potencial para diagnosticar la psicosis
Último revisado: 02.07.2025
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El estándar actual para diagnosticar la psicosis se basa en una entrevista clínica, pero ¿qué pasaría si el diagnóstico se pudiera realizar antes de la aparición de los síntomas? Investigadores del Instituto Del Monte de Neurociencia de la Universidad de Rochester señalan un posible biomarcador cerebral que podría conducir a intervenciones tempranas y tratamientos personalizados.
"Identificar estos biomarcadores podría ser un paso clave para cambiar la forma en que cuidamos, tratamos y prevenimos a los pacientes con psicosis", dijo Brian Keene, PhD, profesor asociado de psiquiatría y del Centro de Imágenes y Neurociencia del Centro Médico de Rochester.
Keane fue recientemente coautor de un artículo publicado en la revista Molecular Psychiatry que describe cómo las exploraciones por resonancia magnética pueden revelar diferencias en los cerebros de personas con psicosis.
"Además de predecir potencialmente la aparición de la psicosis, los biomarcadores también pueden ayudar a estratificar a los pacientes en subgrupos clínicamente relevantes y sugerir nuevas opciones de tratamiento o intervenciones", añadió Keane.
Investigación de la estructura cerebral
En un estudio realizado por el Proyecto de Psicosis Temprana del Conectoma Humano, investigadores examinaron resonancias magnéticas de 159 participantes, 105 de los cuales habían desarrollado un trastorno psicótico en los últimos cinco años. Descubrieron que, en quienes padecían psicosis, las áreas de la corteza sensorial estaban menos conectadas entre sí, pero más conectadas con el tálamo, la "estación de retransmisión" del cerebro encargada de transmitir la información.
Estos cambios se limitaron a dos redes cerebrales:
- La red somatomotora procesa los movimientos y sensaciones corporales.
- Una red visual que crea representaciones de objetos, caras y características visuales complejas.
La combinación de patrones de conectividad interrumpida en estas redes permitió a los investigadores crear lo que llaman un biomarcador "somatovisual".
¿Qué hace que este biomarcador sea único?
Se ha sugerido previamente que las personas con esquizofrenia presentan una conectividad anormal en las redes sensoriales del cerebro. Sin embargo, no se ha aclarado qué redes son las más importantes ni si la disfunción puede explicarse por otros factores, como el uso de antipsicóticos, la ansiedad o el estrés.
Este biomarcador es único debido a las siguientes características:
- Gran efecto de impacto.
- Robusto frente a más de una docena de factores comunes que podrían confundir los resultados.
- Alta confiabilidad para escaneos repetidos."
Según Keane, «una exploración de cinco minutos podría mejorar significativamente la precisión a la hora de predecir qué personas con alto riesgo desarrollarán psicosis. Esto, a su vez, podría permitir un tratamiento o intervención más oportunos».
Próximos pasos
Keane enfatizó la importancia de determinar si el biomarcador somatovisual se presenta antes o al inicio de la psicosis. Esto ayudará a comprender mejor cuándo se pueden implementar intervenciones, lo cual es especialmente importante para prevenir el deterioro en pacientes en riesgo.
Conclusión: Este estudio abre nuevas perspectivas en el diagnóstico temprano de la psicosis, lo que puede mejorar significativamente los resultados del tratamiento y la calidad de vida de los pacientes.