Lo que comes a los 40 puede afectar a tu calidad de vida a los 70

Todos deseamos envejecer con dignidad, pero un nuevo estudio ha descubierto que menos de una de cada diez personas vivirá sin enfermedades y con buena salud física, cognitiva y mental hasta los 70 años o más. El estudio sugiere que llevar una dieta saludable en la mediana edad puede aumentar las probabilidades de lograr un envejecimiento saludable.

Un estudio basado en datos de más de 100.000 personas a lo largo de 30 años descubrió que las personas que siguieron una dieta saludable a partir de los 40 años tenían entre un 43% y un 84% más de probabilidades de tener buena salud física y mental a los 70 años que quienes no lo hicieron.

"Las personas que siguieron hábitos alimentarios saludables en la mediana edad, en particular aquellos ricos en frutas, verduras, cereales integrales y grasas saludables, tuvieron una probabilidad significativamente mayor de lograr un envejecimiento saludable", afirmó la Dra. Anne-Julie Tessier, investigadora postdoctoral de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard. "Esto sugiere que la alimentación en la mediana edad puede influir significativamente en el envejecimiento".

Tessier presentó los hallazgos en NUTRITION 2024, la conferencia anual insignia de la Sociedad Estadounidense de Nutrición, celebrada del 29 de junio al 2 de julio en Chicago.

Los investigadores descubrieron que un alto consumo de frutas, verduras, cereales integrales, grasas insaturadas, frutos secos, legumbres y lácteos bajos en grasa se asociaba con mayores probabilidades de un envejecimiento saludable. Sin embargo, un alto consumo de grasas trans, sodio, carne total, carne roja y carne procesada se asociaba con menores probabilidades de un envejecimiento saludable.

Si bien muchos estudios anteriores han demostrado que una dieta saludable puede ayudar a prevenir enfermedades crónicas, el nuevo estudio es único en su enfoque en el envejecimiento saludable, definido no sólo como la ausencia de enfermedades sino también como la capacidad de vivir independientemente y disfrutar de una buena calidad de vida a medida que envejecemos.

Los investigadores analizaron datos de más de 106.000 personas desde 1986. Los participantes tenían al menos 39 años y no padecían enfermedades crónicas al inicio del estudio, y proporcionaban información sobre su alimentación mediante cuestionarios cada cuatro años. En 2016, casi la mitad de los participantes del estudio habían fallecido, y solo el 9,2 % había sobrevivido hasta los 70 años o más, sin enfermedades crónicas y con buena salud física, cognitiva y mental.

La comparación mostró que las personas en el quintil superior de adherencia al Índice de Alimentación Saludable Alternativa tenían un 84 % más de probabilidades de lograr un envejecimiento saludable que las del quintil inferior. También se encontraron fuertes correlaciones con otros modelos dietéticos, como el Índice Dietético Empírico para la Hiperinsulinemia, la Dieta de Salud Planetaria, la Dieta Mediterránea Alternativa, los Enfoques Dietéticos para Detener la Hipertensión (DASH), entre otros.

El estudio destaca la importancia no solo de prevenir enfermedades crónicas, sino también de promover un envejecimiento saludable en general como objetivo a largo plazo. Tessier señaló que cada uno de los patrones dietéticos saludables se asoció con un envejecimiento saludable en general, así como con componentes individuales del mismo, como la salud física, la función cognitiva y la salud mental.