El cangrejo mantis ayudará a mejorar el diagnóstico del cáncer

Los camarones mantis, que viven a poca profundidad en mares subtropicales y tropicales, poseen una de las visiones más complejas de cualquier criatura terrestre. Por ejemplo, los humanos solo pueden distinguir tres colores primarios, mientras que los camarones mantis ven doce colores. Además, perciben la luz infrarroja y ultravioleta, y son capaces de distinguir entre diferentes polarizaciones de la luz.

En la Universidad de Queensland, especialistas estudiaron a estos animales y concluyeron que el diagnóstico del cáncer puede mejorarse significativamente. En su investigación, los científicos reprodujeron las propiedades de los ojos de estas singulares criaturas marinas con una cámara convencional, lo que les permitió ver literalmente a través del tejido humano. Los científicos planean implementar una tecnología similar en teléfonos inteligentes.

Como ya se mencionó, los ojos del camarón mantis pueden detectar la luz polarizada. En células cancerosas y sanas, dicha luz se refleja de forma diferente, y los especialistas han logrado crear una cámara que convierte las señales que solo detectan los ojos de un cangrejo en señales comprensibles para el ojo humano. Como resultado, los especialistas han obtenido un sistema capaz de determinar un diagnóstico durante el estudio de la actividad de las células nerviosas o el diagnóstico de enfermedades oncológicas.

Actualmente, existe un equipo de este tipo, pero es demasiado pesado. Los especialistas pretenden desarrollar una versión pequeña de la cámara que pueda capturar imágenes a través del tejido. Actualmente, se prescribe una biopsia para confirmar un diagnóstico oncológico; el nuevo sistema es adecuado para estudiar neuronas. Además, durante experimentos con roedores, los científicos lograron diagnosticar cáncer en etapas tempranas.

El cáncer es la enfermedad más común hoy en día. Los expertos no solo están desarrollando nuevos métodos efectivos y seguros para diagnosticar enfermedades, sino también maneras de mejorar la efectividad del tratamiento. Como lo demuestran estudios de científicos del London College y la Universidad de Southampton, las bayas pueden mejorar la efectividad del tratamiento oncológico. Por ejemplo, el extracto de aronia tiene la capacidad de destruir rápidamente las células cancerosas. Las bayas de aronia contienen una gran cantidad de vitaminas, antioxidantes, en particular polifenoles. El extracto de las bayas de la planta se probó en células patológicas en cáncer de páncreas. Durante el experimento, algunas células cancerosas se trataron con un fármaco utilizado durante la quimioterapia y otras con extracto de aronia en diferentes concentraciones. Los científicos también probaron el efecto del efecto combinado de los fármacos de quimioterapia y el extracto de aronia sobre las células cancerosas.

Como resultado, el extracto mostró su efecto en 2 días, causando la muerte de las células cancerosas (concentración de 1 mcg por 1 ml). Al mismo tiempo, en la concentración máxima (50 mcg), el extracto resultó ser completamente inocuo para las células sanas. La administración de pequeñas dosis del extracto en combinación con quimioterapia demostró una eficacia asombrosa: se requirió una dosis menor de medicamento para el tratamiento, lo que redujo la probabilidad de efectos secundarios.

En estudios anteriores, el extracto de aronia mostró buenos resultados en estudios sobre cáncer cerebral. Los científicos sugieren que se debe a los polifenoles vegetales, que también se encuentran en el té verde, el cacahuete, la cúrcuma y la soja.

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