La nanobiotecnología se utilizará para tratar infecciones microbianas

Los nanotecnólogos nos han deleitado con otro descubrimiento: en esta ocasión, los científicos han indicado la posibilidad de utilizar microrobots y micromotores para eliminar infecciones microbianas en el tracto digestivo. Los micromotores tienen un grosor similar a la mitad de un cabello humano. Son capaces de desplazarse por la mucosa gástrica y neutralizar el exceso de ácido, tras lo cual el dispositivo nanobioeléctrico secreta un antibiótico que destruye la bacteria Helicobacter. Los principales desarrolladores del proyecto son el nanotecnólogo Dr. Joseph Wang y el profesor Liangfang Zhang, representantes del Colegio de Ingeniería Jacobs (Universidad de California, San Diego). Los investigadores lograron forzar el micromotor a moverse dentro del cuerpo y, de ser necesario, a secretar fármacos. Según los científicos, el método creado sentará las bases para una nueva era en el tratamiento de enfermedades gastrointestinales.Anteriormente, la mayoría de los fármacos administrados en el estómago se neutralizaban en un ambiente ácido. Ahora, tanto antibióticos como agentes enzimáticos o proteicos pueden administrarse libremente en el sistema digestivo. Para proteger el fármaco administrado, los médicos utilizaban un recubrimiento específico resistente al ácido. Y para atenuar el efecto del ácido, utilizaban inhibidores de la bomba de protones (por ejemplo, los conocidos Omez y Omeprazol). Sin embargo, estos tratamientos no siempre eran fiables. Además, eran a largo plazo, costosos y presentaban numerosos efectos secundarios. Gracias a la nanotecnología, fue posible administrar el fármaco a su destino y, al mismo tiempo, preparar el terreno para su acción efectiva. Los micromotores penetran en la cavidad estomacal, estabilizan el nivel de acidez a los valores requeridos y solo entonces liberan el fármaco. "Todo lo ingenioso es simple. El fármaco antimicrobiano funcionará sin verse afectado por la agresión del ambiente ácido. Ahora todo está resuelto de una vez: no hay necesidad de tratamientos a largo plazo por etapas. El medicamento funciona de forma sencilla y fiable", explica la científica Berta Esteban Fernández de Ávila. Según explicaron los responsables del proyecto, cada microrobot y micromotor cuenta con un núcleo esférico de magnesio, recubierto con un protector a base de dióxido de titanio. Bajo el protector se esconde una dosis del fármaco antibacteriano claritromicina, que se libera solo cuando se alcanza un cierto nivel de acidez en el ambiente. La última capa superficial de la nanopartícula es quitosano, cuya función es mantener el micromotor cerca de las paredes del estómago. Una vez que el neutralizador de ácido comienza a actuar, se liberan microgases de hidrógeno que, a su vez, actúan como fuerza de empuje adicional para el micromotor. A continuación, se normaliza la acidez intragástrica y se libera el antibiótico. El micromotor tiene una estructura biodegradable y no supone ningún peligro para el paciente. El experimento con roedores ya ha demostrado excelentes resultados. Según los científicos, es de suponer que en breve las nanopreparaciones podrán sustituir por completo el tratamiento farmacológico tradicional de las enfermedades estomacales.

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