La supervisión parental de la vida de un niño puede ayudar a protegerle del tabaco

Una crianza parental estricta ayudará a proteger a las generaciones más jóvenes de un hábito tan perjudicial como el tabaco. Esta es la conclusión a la que llegaron empleados de la Universidad de Georgetown, aunque la etnia de la familia no tuvo mucha relevancia. Los científicos observaron las vidas de más de 400 adolescentes (con el consentimiento de sus padres), cuya edad promedio era de unos 13 años. Los científicos realizaron una serie de encuestas sobre el tabaquismo (en particular, sobre si los padres de los estudiantes fumaban), los estilos de crianza y los sistemas de castigo empleados en cada familia.

Tras realizar las encuestas, los especialistas observaron la vida de los niños seleccionados para el estudio durante cuatro años y, según se descubrió, los niños de familias con mayor control parental ni siquiera probaron a fumar. Los científicos han determinado desde hace tiempo que la mayoría de las personas que fuman a lo largo de su vida se vuelven adictas a este hábito dañino antes de los 18 años.

Por control parental estricto, los científicos se refieren a establecer reglas claras en casa, un toque de queda y una hora específica para que el niño se acueste. Además, es necesario establecer un castigo por infringir las reglas establecidas, en particular si se le encuentra cigarrillos al niño o si intenta fumar. Según los expertos, este enfoque educativo funciona mucho mejor que una actitud comprensiva y más leal.

Los psicólogos están convencidos de que es imposible evitar por completo las prohibiciones en la crianza de un hijo. A medida que los niños crecen, se enfrentan a un sistema de prohibiciones generalmente aceptado. Si los padres retrasan deliberadamente la introducción de este sistema al niño, le resultará más difícil formarse una idea propia del mundo real en el que, tarde o temprano, tendrá que vivir.

Como señaló Cassandra Stanton, directora de este estudio, en el pasado numerosos proyectos han estudiado diversos estilos de crianza en la familia. Sin embargo, los resultados de este proyecto demostraron cómo ciertas estrategias de crianza ayudan a proteger a las generaciones más jóvenes de malos hábitos, ya que son los padres y su actitud hacia la crianza y el futuro de sus hijos los que desempeñan un papel fundamental en este proceso.

Cassandra Stantoe cree que seguir reglas claramente establecidas, un control estricto y un sistema de castigo por desobediencia protegerá a los adolescentes del comportamiento desinhibido, así como de las graves consecuencias de dicho comportamiento. Para evitar que los adolescentes se familiaricen con la nicotina por simple entretenimiento y profundicen en la adicción a un mal hábito, los padres deben adoptar estrategias de crianza estrictas y un mayor control sobre la vida diaria de sus hijos. Sin embargo, como señaló Patrick Heather, del centro de investigación del Instituto Nacional del Cáncer, un control estricto no debe ser excesivo, ya que esto generará relaciones tensas entre padres e hijos. Además, un control demasiado estricto contribuye al desarrollo del estrés y los trastornos mentales en los adolescentes.

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