¿Es perjudicial el agua dura? Ventajas e inconvenientes

Cuando abres el grifo para tomar un vaso de agua o lavarte la cara, probablemente no piensas en lo que hay en el agua, aparte de en ella misma. Dependiendo de dónde vivas y de si tienes un descalcificador, el agua puede contener minerales disueltos como calcio y magnesio. Estos minerales pueden influir en la eliminación de ciertos contaminantes, como el plomo, del agua.

Cuantos más minerales disueltos tenga el agua, más dura será. Pero ¿es el agua dura realmente buena o mala para la salud?

Como investigadores de ingeniería que estudiamos la calidad del agua, hemos visto los efectos positivos y negativos que el agua blanda y dura pueden tener en todo, desde los sistemas de plomería hasta el cuerpo humano.

¿Qué es el agua dura? El agua dura contiene minerales disueltos como calcio, magnesio, hierro y manganeso. El agua blanda contiene concentraciones más bajas de estos minerales.

La dureza se mide en términos de carbonato de calcio, CaCO₃, que se utiliza como base para comparar diferentes minerales.

La cantidad de estos minerales en el suministro de agua de una ciudad varía según la región, dependiendo tanto de la fuente del agua como de cómo se trata.

Las comunidades que obtienen agua de pozos en lugar de cuerpos de agua superficiales como lagos, arroyos, ríos y embalses suelen lidiar con la dureza del agua antes de su tratamiento. A medida que el agua subterránea se desplaza por el suelo hasta el pozo, absorbe minerales. Al mismo tiempo, en zonas donde las rocas y los sedimentos son más susceptibles a disolverse en el agua, esta puede ser más dura.

Impacto en las tuberías y sistemas de distribución de agua

El agua demasiado dura o demasiado blanda puede dañar las tuberías y provocar problemas de salud y estéticos.

Debido a que el agua dura tiene una mayor concentración de minerales, estos pueden acumularse en las tuberías, causando obstrucciones en viviendas y sistemas públicos de agua. La dureza también genera más depósitos a temperaturas más altas, por lo que los calentadores de agua son susceptibles a la acumulación de minerales. En zonas con agua dura, los calentadores de agua tienen una vida útil más corta.

Pero el agua dura puede ser perjudicial. Si bien los minerales presentes en el agua dura pueden obstruir las tuberías, la fina capa de depósitos minerales en las tuberías puede protegerle de las toxinas que pueden filtrarse de la propia tubería. El agua sin minerales puede corroer las tuberías, ya que, sin esta fina capa protectora, puede empezar a corroerlas, liberando metales de estas. Beber esta agua puede implicar el consumo de metales como plomo, cobre y hierro.

Si bien el agua demasiado blanda o demasiado dura puede afectar las tuberías de forma diferente, existen otros procesos químicos, además de la dureza, que influyen en la corrosión y la obstrucción de las tuberías. Por lo tanto, no existe un nivel específico de dureza que sea motivo de preocupación. Las empresas de agua toman las medidas pertinentes para ajustar los niveles de dureza del agua.

Efecto sobre la piel y el cabello

Usar agua dura o blanda para lavarse la cara también puede tener un impacto notable en la piel y el cabello.

El agua dura tiende a resecar la piel. Los minerales presentes en ella eliminan la humedad de la piel y crean depósitos que obstruyen los poros.

El agua dura también puede deshidratar el cabello, dejándolo seco y áspero. El cabello seco es más propenso al frizz, los enredos y la rotura. Los depósitos minerales también pueden acumularse en el cabello y el cuero cabelludo, obstruyendo los folículos pilosos y provocando caspa y un crecimiento capilar lento.

Muchos hogares cuentan con sus propios sistemas de descalcificación de agua. Un sistema de descalcificación puede ayudar con el cabello y la piel secos, además de prevenir la acumulación de sarro. Sin embargo, muchos de estos sistemas sustituyen el calcio y el magnesio por sodio, un mineral que no contribuye a la dureza del agua, para reducir la dureza general. El alto contenido de sodio en el agua puede ser un problema para quienes siguen una dieta baja en sal.

Beneficios generales para la salud

Aparte de los problemas estéticos y de calentamiento del agua, beber agua dura es realmente bueno para la salud y no tiene efectos secundarios graves.

Por ejemplo, el magnesio y el calcio adicionales que consumes a través del agua dura pueden ser una solución suave para los problemas digestivos y el estreñimiento.

Además, estudios han demostrado una correlación positiva entre la dureza del agua potable y la salud ósea. Dado que el calcio es un mineral importante para los huesos, las personas que viven en zonas con agua potable con mayor contenido de calcio pueden tener una mayor densidad ósea y ser menos propensas a la osteoporosis.

Los investigadores también descubrieron que beber agua dura se asociaba con una reducción de las muertes por enfermedades cardiovasculares. El magnesio ayuda a regular el músculo cardíaco, y el calcio mantiene el equilibrio de sodio y potasio en el músculo cardíaco, lo cual es necesario para su funcionamiento.

Ya sea que tenga agua dura o blanda, no hay de qué preocuparse. Las empresas de agua toman las medidas necesarias para garantizar agua potable a las comunidades a las que sirven.

Para obtener más información sobre la dureza del agua en su zona, puede contactar a su compañía local de agua para conocer su proceso de tratamiento. Los propietarios de pozos privados pueden contactar a su gobierno estatal para conocer las recomendaciones de análisis de agua en su zona.