El sobrepeso acelera el envejecimiento del cerebro

La juventud del cerebro depende del peso, según afirman especialistas británicos. Observaciones en voluntarios (con peso normal y con sobrepeso) mostraron que, con la obesidad, el tejido cerebral parece 10 años más viejo en promedio.

Con la edad, el cerebro se reseca, pero en las personas con sobrepeso este proceso ocurre algo más rápido que en las personas delgadas. Actualmente, los científicos no pueden determinar con certeza si el sobrepeso causa un envejecimiento acelerado del cerebro y, en consecuencia, un deterioro de las capacidades cognitivas, o si, por el contrario, algunos procesos cerebrales que causan el envejecimiento provocan obesidad.

En la Universidad de Cambridge, la profesora Lisa Ronan y sus colegas estudiaron los cerebros de más de 500 personas de entre 20 y 87 años y descubrieron que existe una conexión entre el peso y la velocidad del envejecimiento cerebral. Al estudiar el estado de los participantes en el experimento, los científicos prestaron atención al estado del metabolismo, la dieta y todo aquello que pudiera afectar el peso o el desarrollo de la diabetes.

Mediante resonancia magnética, los especialistas determinaron no solo el volumen de la sustancia blanca, sino también el grosor de la corteza cerebral en voluntarios. Resultó que la estructura en personas con sobrepeso y delgadas presenta diferencias, especialmente después de los 40 años.

En las personas con sobrepeso, los procesos de envejecimiento activo y una disminución del volumen del cerebro comienzan a producirse a partir de los 40 años, y al cabo de 10 años tiene el mismo aspecto que el cerebro de una persona delgada a los 60 años.

Un dato interesante fue que los cambios afectaron principalmente a la materia blanca, por lo que el coeficiente intelectual y las capacidades cognitivas en personas obesas y delgadas prácticamente no mostraron diferencias.

Según el profesor Ronan, ahora es muy importante comprender las causas y los efectos de los procesos de envejecimiento cerebral acelerado en las personas obesas, ya que en los últimos años el número de personas obesas en el mundo y la esperanza de vida media han aumentado rápidamente.

Por cierto, especialistas estadounidenses realizaron recientemente estudios similares que descubrieron que el cerebro de las personas con sobrepeso funciona de forma diferente al de las personas más delgadas. Según los científicos, el cerebro de las personas con sobrepeso envía señales al cuerpo para que disfrute más de los alimentos dulces o poco saludables, y la razón de esto podría ser un metabolismo alterado.

En la Universidad de Washington, expertos han descubierto que, a medida que las personas envejecen, les gustan menos los dulces debido a cambios en la parte del cerebro responsable de las recompensas. La producción de la "hormona de la felicidad" se asocia con estímulos externos: comida, diversos eventos, etc. Sin embargo, con la obesidad, el cerebro comienza a funcionar de forma diferente. En un experimento con 44 personas, 20 de las cuales tenían un peso normal y el resto eran obesas, se descubrió que las personas obesas no tienen una conexión entre los dulces y la hormona de la felicidad. Los participantes del estudio tuvieron que beber una bebida con diferentes cantidades de azúcar y someterse a una resonancia magnética. Tras analizar los datos, se descubrió que el sobrepeso causa resistencia a la insulina, lo que afecta las preferencias alimentarias.

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