Soñar con un asesinato sugiere una tendencia a la agresividad.

Los expertos llevan mucho tiempo interesados en el tema de los sueños. Un estudio reciente en este campo demostró que las personas propensas a la agresión suelen ver escenas suicidas en sus sueños. Los investigadores observaron que los sueños de suicidio suelen ser soñados por personas crueles, retraídas, centradas en su mundo interior y con dificultades para conectar con los demás. Sin embargo, este descubrimiento ya ha sido criticado por expertos independientes.

En el laboratorio del sueño, ubicado en el Instituto Central Alemán de Salud Mental, están convencidos de que el sueño refleja el estado de vigilia de una persona de forma hipertrofiada. Los científicos llegaron a estas conclusiones tras encuestar a 400 estudiantes. En promedio, cada participante podía recordar de dos a tres sueños en una semana; alrededor del 19% de los estudiantes indicó que el sueño estaba relacionado con un asesinato.

Al mismo tiempo, los científicos observaron que los hombres tenían sueños agresivos con más frecuencia que las mujeres.

Lo que realmente sorprendió a los expertos fue que los sueños de este tipo estaban asociados no sólo con la agresividad de la persona, sino también con el aislamiento.

Lo más probable es que los introvertidos (personas retraídas a las que les resulta difícil comunicarse con los demás) escondan una agresión interna que encuentra una salida en sus sueños.

Los expertos también observaron que los sueños sobre asesinatos no molestaban muy a menudo a los participantes (alrededor del 4% de los casos entre los hombres y menos del 1% entre las mujeres).

Otro estudio sobre los sueños reveló que las personas ciegas de nacimiento eran más propensas a sufrir pesadillas (alrededor del 25 % de sus sueños). En personas con visión normal, las pesadillas representaban el 6 % de sus sueños.

Las personas ciegas de nacimiento tienen sueños especiales que no se relacionan con imágenes visuales; en este caso, el sueño se relaciona más con sensaciones gustativas, táctiles y olfativas. Especialistas entrevistaron a 50 personas y descubrieron qué soñaron durante el último mes.

La mitad de los participantes en la encuesta tenían una visión normal, 11 personas eran ciegas de nacimiento y 14 se quedaron ciegas durante su vida.

En el primer grupo (con visión normal) las pesadillas estaban asociadas a lo que amenazaba a la persona en la realidad.

En el tercer grupo de encuestados, en el que las personas perdieron la vista, los científicos observaron que el sueño estaba asociado con imágenes visuales, pero la cantidad de tales sueños dependía del período de ceguera (cuanto más tiempo había pasado desde la pérdida de la vista, menos imágenes visuales veía una persona en un sueño), mientras que el 7% de los sueños estaban asociados con pesadillas.

En el grupo de personas ciegas de nacimiento, los sueños se asociaron con emociones, lo que llevó a los expertos a sugerir que las personas ciegas de nacimiento son más receptivas y vulnerables y, por lo tanto, sienten el peligro y la inseguridad de forma más aguda y necesitan apoyo psicológico.

Los expertos también recomiendan prestar atención a los sueños de los niños. Las pesadillas frecuentes pueden indicar un trastorno mental.

Muchos niños sufren pesadillas, pero deberías preocuparte si tu hijo tiene pesadillas constantemente, mueve los brazos y grita mientras duerme.

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