Marcadores de malnutrición

La desnutrición es una condición causada por cambios en el consumo de alimentos o una utilización deficiente de los mismos por parte del organismo, lo que provoca disfunción a nivel subcelular, celular y orgánico. El síndrome de desnutrición puede desarrollarse por una deficiencia de cualquiera de los nutrientes esenciales del organismo (proteínas, fuentes de energía, vitaminas, macro y microelementos). Sin embargo, en la práctica clínica, la desnutrición proteica o proteico-energética es la más frecuente. Por lo general, en la desnutrición proteico-energética grave, se observan signos de deficiencia de ciertas vitaminas, macro y microelementos. La desnutrición con deterioro del estado trófico en toda su diversidad (proteínas, energía, vitaminas, etc.) se observa en el 20-50% de los pacientes quirúrgicos y terapéuticos.

La evaluación nutricional es ahora un componente obligatorio de la atención médica para pacientes hospitalizados en las principales clínicas de los países más desarrollados del mundo. La Comisión Conjunta de Acreditación de Organizaciones de Atención Médica (JCAHO) exige que la nutrición del paciente cumpla con ciertos estándares, entre ellos:

• evaluación del estado nutricional del paciente;
• registro de manifestaciones clínicas de los trastornos alimentarios;
• Monitorizar los cambios en el estado nutricional y la respuesta del paciente a los ajustes realizados.

El proceso de evaluación nutricional incluye diversos métodos, que pueden dividirse en 4 grupos:

• métodos de evaluación de alimentos;
• antropométrico (somatométrico);
• clínico;
• laboratorio.

Estos métodos se pueden utilizar para evaluar la nutrición por separado, pero su combinación es la más adecuada.

Los métodos antropométricos de evaluación nutricional son los más accesibles e incluyen la medición de:

• altura (longitud del cuerpo);
• masa corporal;
• circunferencias abdominales, de cuello, de hombros, etc.;
• grosor de la piel y pliegues de grasa en puntos estándar;
• cálculo del índice de masa corporal [la relación entre el peso corporal (kg) y la altura (m) al cuadrado].

Los métodos antropométricos tienen grandes ventajas: son sencillos, inocuos, no invasivos, pueden realizarse a pie de cama y no requieren equipos costosos. Sin embargo, presentan desventajas, entre ellas:

• baja sensibilidad (no permiten detectar perturbaciones a corto plazo del estado trófico y no identifican deficiencias específicas);
• incapacidad para distinguir los trastornos causados por la deficiencia de algún nutriente de los trastornos causados por el desequilibrio entre la ingesta de proteínas y energía;
• Algunas condiciones del paciente (edema, obesidad, pérdida de elasticidad de la piel, alteración de la turgencia) no permiten realizar mediciones precisas.

La evaluación clínica nutricional implica la anamnesis y la exploración física para detectar signos y síntomas asociados con trastornos del estado nutricional. En la mayoría de los casos, estos signos no son detectables hasta que la desnutrición está avanzada. Por lo tanto, las evaluaciones clínicas no detectan trastornos nutricionales en las etapas clínicas o preclínicas tempranas.

Recientemente, los métodos de laboratorio para la evaluación nutricional se han popularizado en la práctica clínica. En las deficiencias nutricionales primarias y secundarias, los depósitos tisulares se agotan gradualmente, lo que resulta en una disminución del nivel de estas sustancias o sus metabolitos en ciertos ambientes corporales, lo cual puede detectarse mediante métodos de laboratorio. El uso de métodos de laboratorio también es preferible desde un punto de vista económico, ya que permite detectar los signos iniciales de deficiencia antes del desarrollo de un síndrome clínico (por lo tanto, se reduce el gasto en tratamiento), así como identificar la deficiencia de nutrientes específicos.

Todas las pruebas de laboratorio para la evaluación nutricional se pueden dividir en 2 categorías:

• determinación de la concentración de sustancias en el suero sanguíneo del paciente;
• determinación de la tasa de excreción de sustancias en la orina.

El suero sanguíneo contiene sustancias recién absorbidas que provienen de los alimentos. Por lo tanto, la concentración de una sustancia en el suero sanguíneo refleja su consumo (ingesta) actual con los alimentos, es decir, evalúa el estado nutricional en un momento dado, y no a lo largo de un período prolongado, lo cual es fundamental en el tratamiento de emergencias. Si la función renal del paciente no está alterada, un análisis de orina permite evaluar el metabolismo de minerales, vitaminas y proteínas. La excreción de estas sustancias en la orina también refleja el estado nutricional en un momento dado, y no a lo largo de un período prolongado.

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