La psoriasis o liquen escamoso es una dermatosis de origen no infeccioso. Las verdaderas causas de la enfermedad no están claras. Actualmente, se considera que el factor desencadenante es una alteración de los procesos autoinmunes.
Acompañada de dolor y picazón intensa, causa no solo sufrimiento físico sino también malestar psicológico. La causa principal de la psoriasis plantar puede ser una lesión cutánea común.
Las erupciones psoriásicas pueden tener una localización específica y aparecer siempre en las mismas zonas del cuerpo. El curso clínico de esta forma de la enfermedad suele ser más leve. Sin embargo, se caracteriza por exacerbaciones frecuentes y persistentes.
De todas las formas de psoriasis clasificadas en dermatología clínica, la psoriasis exudativa es la que plantea más preguntas a la hora de determinar sus síntomas.
De todas las variedades de psoriasis, los médicos diagnostican con mayor frecuencia la psoriasis en placas, también llamada psoriasis simple, ordinaria o vulgar.
La psoriasis es una enfermedad muy común. Puede afectar prácticamente cualquier parte de la piel y el cuerpo. Por ejemplo, se presentan lesiones en las uñas, los dedos, la cara, el cuero cabelludo, así como en los huesos y las articulaciones. Sin embargo, la psoriasis en los codos sigue siendo la más frecuente.
En la forma clásica de la psoriasis las lesiones suelen ser bilaterales y simétricas, por lo que es importante realizar un examen completo de la piel, incluso si el paciente no ha notado estas lesiones.
La mayoría de los pacientes con psoriasis vulgar presentan erupciones características no solo en la piel de los codos y las rodillas, sino también en todo el cuerpo, incluida la cabeza. Las lesiones cutáneas en la cabeza suelen definirse como psoriasis seborreica.